sábado, 7 de noviembre de 2009

MITA Y LUXARDO, UN BASTIÓN INEXPUNABLE EN MAR DEL PLATA










Desde Mar del Plata, MITA Y LUXARDO, todos los días, aportan su trabajo para nuestra comunidad de LA TERCERA PRIMAVERA, O TERCERA EDAD O, LOS VIEJOS, JUBILADOS Y de todos aquellos que deambulamos entre los tejes y manejes de las políticas embrollonas de los gobiernos que administran -nuestras vidas-
EMBAJADA DE ORO, desde este Conurbano Sur, les envía un cariñoso saludo y siempre a disposición y, si no lo hago más rápido, es por falta de tiempo. UN ABRAZO AMIGOS.

ASOCIACIÓN CIVIL SIN FINES DE LUCRO CON PERSONERIA JURÍDICA 941/2006

DECLARACION PUBLICA DE TRABAJADORES JUBILADOS

BASTA DE ENGAÑOS Y LIMOSNAS, SOMOS MAYORES,PERO NO IDIOTAS UTILES

La Asociación Argentina de Jubilados Aportantes, ejerciendo la representación genuina de trabajadores que resignaron parte del fruto de su trabajo al Estado para que lo administre y reintegre a través de prestaciones dignas, confiando en la Constitución y en los derechos consagrados en ella, en el imperio de las leyes vigentes, en el rigor e independencia de la Justicia, en la integridad ética y moral de legisladores, funcionarios y políticos que irían a administrar dichos fondos, preservándolos con el objeto de puedan ser reintegrados como jubilaciones y pensiones dignas, hoy se ve en la imperiosa necesidad y en la gran responsabilidad de emitir una opinión que, por provenir de quienes son los verdaderos titulares de la llamada clase pasiva resulta sin lugar a dudas la más autorizada, a fin de esclarecer debidamente los hechos que vienen confundiendo deliberadamente a algunos de los mayores retirados y, por cierto, a muchos de la opinión pública que, por diferentes circunstancias, se muestran indiferentes, pretendiendo hacerles creer que a los jubilados se les están otorgando beneficios que no son tales, mientras se les miente con descaro e hipocresía y se los distrae con dádivas que humillan y que dilatan perversamente el reconocimiento de sus derechos.

Hoy, AAJA y los jubilados y pensionados damnificados podrían expresar su clamor con todo rigor y derecho, precisando cada una de las irregularidades, omisiones y despojos incurridos a los que fueron y son sometidos por el Estado, empleando la famosa frase YO ACUSO.

Sin embargo, nos reservamos el derecho de hacerlo en su momento, amparados y confiando nuevamente en la Justicia Independiente , y en el reconocimiento de los patriotas y estadistas que aspiramos revaliden los atributos de la Argentina que alguna vez fue; mientras tanto nos limitamos a decir:

EXIGIMOS que los fondos previsionales sean aplicados a sus fines específicos, transparentados en cuanto a su conservación, utilización y rendimientos, mediante el control establecido por las leyes y con participación activa de los propios jubilados.

EXIGIMOS que se establezca un orden prioritario para regularizar la deuda con la clase pasiva, comenzando por reconocerla y documentarla formalmente.

EXIGIMOS que se abonen sin más trámite todas las sentencias firmes por recomposición de los haberes y que se cumpla la promesa de no apelar los fallos consagrados haciendo uso, como es norma, de chicanas de toda índole.

EXIGIMOS que se modifique la falsa y mal llamada ley de movilidad, ajustando el procedimiento al criterio constitucional sobre el que se basaron los últimos fallos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

EXIGIMOS que se depure el padrón de jubilados y pensionados engrosado improcedentemente por la última moratoria con individuos que nunca aportaron, tal el caso de los indigentes, y hasta con oportunistas, o el reciente anunciado plan de subsidio a la niñez, para que esas prestaciones que no se corresponden con aportes efectivos realizados y de las que no cuestionamos en que el Estado se haga cargo, sean atendidas por Rentas Generales bajo el carácter de prestaciones asistenciales.

EXIGIMOS que se resuelvan por vía administrativa y en forma sumaria los pedidos de reajuste de haberes y el pago de retroactividades, sin que deba recurrirse a la vía jurídica para lograrlo.

EXIGIMOS que se apliquen con el mayor rigor por la Justicia las sanciones que correspondan por incumplimiento de los deberes de los funcionarios públicos y que se castigue con el máximo de las penas previstas cuando se incurra en malversación de los caudales destinados a atender prestaciones de la Seguridad Social.

EXIGIMOS que se nos respete por lo que fuimos y por lo que somos: trabajadores dignos y auténticos, que no queremos que se nos utilice demagógicamente, ni como variable de ajuste para encubrir déficits de administración o lograr ventajas electoralistas.


BUENOS AIRES, Noviembre de 2009.

Hugo de la Sota Carlos Baldassarre

Presidente Secretario